Viejos amores

Hace un par de años cambie el rumbo de mi vida, nada de lo planeado se cumpliria, y emprendí un nuevo camino muy distinto al deseado y esperado, es así que me encontré buscando un espacio donde vivir  y alquile un departamento.
Este lugar donde mi cachorro y yo, nos encontramos en el amor mas pleno, me costo!, pero lo amueble, lo adorne, pero principalmente trate de llenarlo de calor, de amor, de bienestar, y me enorgullese darme cuanta que hasta ahora salio bien. No hay cosa mas linda para Alejo llegar a su casa!.
En ese proceso de identidad familiar, mi abuela me visito, ella, viejita con su artrosis, subió estos dos pisos por escalera, y obvio como abuela y buena bisabuela nos trajo regalos. Una planta, uhhhh! que garrón regarla, tratar que no se seque, buscarle un lugar acorde, pero esa sensacion de pesadez sobre el regalo tan ansiado que mi abuela me brindaba se fue diluyendo a medida que me contaba la historia de esa planta.
Con regularidad ella visitaba a mi abuelo en el cementerio, su fiel compañero portador de dos ojos profundamente celestes, persona callada, dulce y de pasar sereno por lo que recuerdo. En una de esas visitas, mi abu, tomo un clavel del florero en el cual le dejaba flores a El, y lo planto en su patio, en su jardín, ese lugar que representa para ella casi todo su mundo y este clavel floreció!!!!.

Mi abuela es una persona con una inmensa generosidad y una bondad que invita a la emoción, ella me estaba regalando ese clavel, esa planta, debo confesar que le busque un lugar adecuado, que la riego con frecuencia y que trato y tratare que no se seque jamas, debo confesar que la veo y me llena de paz, capaz porque en ella veo reflejado el verdadero amor, el que proyecte y no se concreto, el amor de esos dos viejos que aun tan distantes siguen tan amantes..... Hace dos años que esa planta me brinda un clavel cada tanto.....